Wave

WAVE es un estimulador con una función terapéutica. A base de ondas sónicas nos estimula a la vez que ejercita nuestro suelo pélvico. A través de sus 17 modos con diferentes intensidades activa el suelo pélvico para mejorar su tonicidad o relajar. Según el modo que utilices podrás tener relaciones más placenteras, aumentar la lubricación o explorar otras formas de sentir placer y mejorar tus orgasmos y sensibilidad. Con solo 3 botones podrás hacer todo eso. El botón de apagado y encendido lo acciona, cada vez que lo pulsamos cambia de modo y para aumentar y disminuir la intensidad tenemos el + ó -. Es suficiente con colocarlo sobre el clítoris y combinar sus modos. Recuerda limpiarlo antes y después y usarlo con productos respetuosos con tu cuerpo y con WAVE.

Wave estimula el clítoris a través de ondas sónicas en lugar de las clásicas vibraciones. Estas ondas rebotan en el propio dispositivo y llevan a tu cuerpo para estimularlo sin necesidad de contacto.

Sabemos que WAVE te parece uno más. Y sí, tienes razón, pero a medias. En un primer plano parece (y es) un estimulador, pero es su interior lo que cuenta. Y es que WAVE está programado como un entrenador de suelo pélvico. Es decir, que lo que nosotras sentimos es placer, estimulación, pero nuestro suelo pélvico se tonifica por los movimiento que ejerce sobre él a través del clítoris. Podemos decir que es una forma más placentera y lúdica de hace Kegel. Lo colocas, disfrutas y tu cuerpo trabaja. El único con patrones terapéuticos para mejorar tu salud pélvica mientras disfrutas.

Siempre que quieras trabajar el suelo pélvico de otra manera, de una forma divertida y excitantes. WAVE tiene la cualidad de poner en forma nuestra musculatura pélvica mientras disfrutamos. Estés en la etapa que estés puedes usarlo.

Wave es muy fácil de mantener. Antes y después de cada uso debemos lavarlo con jabón neutro, que respete nuestro PH o un limpiador para zonas íntimas.

Encontrarás un cable de conexión USB en la caja. Debes insertar el cable en el puerto de recarga que encontrarás en la base de Wave. está indicado con las letras DC. Enchufa el cargador a la corriente eléctrica. Durante la carga se encederá una luz le roja en el boto´n on/off y parpadeará hasta que la carga esté comple. Una vez esté cargado completamente la luz permanecerá constante.

Cuando WAVE se está cargando se queda en un estado de StandBy, por eso parece que no funciona. Se concentra en cargarse y una vez cargado, ya podemos volver a utilizarlo.

Las medidas de Wave son 37mm X 59,5 mm x 77mm

WAVE es un estimulador terapéutico bastante silencioso. Tiene menos de 50db, lo que lo hace uno de los más discretos.

A través de sus ondas sónicas WAVE estimula el riego sanguíneo y con ello la lubricación de forma natural. Si al principio te sientes incómoda puedes aplicar un poco de lubricante de base a agua o un hidratante íntimo.

Gracias a los estímulos de WAVE hace que conectemos con nuestros genitales y que seamos capaces de centrarnos en sentir y sentir de una manera diferente. Por ello, es recomendable cuando no sabemos muy bien cómo tocarnos, el deseo se ha escapado por la ventana o estamos en una etapa con la libido baja.

Coloca WAVE sobre el clítoris después de aplicar un poco de lubricante de base a agua, enciéndelo y disfruta. Puedes jugar con sus diferentes modos y empezar a sentir. No hace falta que hagas nada más.

WAVE es resistente al agua, pero no podemos sumergirlo. No hay problema para lavarlo o usarlo en la ducha, pero nunca debemos introducirlo a grandes profundidades.

Con WAVE siempre debes usar un limpiador apto y respetuoso, así como lubricantes o hidratantes de base a agua. Nunca se deben usar productos oleosos, con base de silicona o vaselina.

El estimular de AMMO podemos utilizarlo en cualquier momento. No tiene contraindicaciones. En el caso de que tu suelo pélvico necesite relajarse, puedes hacerlo con el primer modo de WAVE.

De una manera lúdica y placentera, mientras tú disfrutas WAVE hace que tu musculatura de suelo pélvico trabaje y se mueva al ritmo del modo que estés utilizando. Es otra forma de trabajar el suelo pélvico.